Antigua GFC logró una importante victoria sobre un rival histórico y siempre agradable de vencer, Guastatoya, en un partido que, aunque tuvo sus dificultades, demostró el compromiso de los jugadores Aguacateros con su equipo. Desde la derrota ante Municipal, los goles han sido escasos, pero el espíritu de lucha pareciera recobrado.
Dewinder Bradley sigue destacando como uno de los jugadores más entregados en el campo, mientras que el regreso de Oscar Santis, tras su suspensión, aportó solidez y peligro en la portería defendida por Adrián de Lemos. Además, Luis José Morán, el guardameta de confianza de los Aguacateros para este tipo de situaciónes, cumplió su papel de forma admirable en ausencia de Jesse González, quien debió cumplir con una suspensión.
Dwight Pezzarossi, en su papel como entrenador interino, logra su primera victoria en la temporada, un alivio para los aficionados que anhelaban un respiro en medio de un periodo de torneo muy complicado. Sin embargo, aún queda trabajo por hacer, ya que deben completar las jornadas pendientes esta semana, enfrentando al Deportivo Mixco, un equipo que lucha por encontrar la regularidad.
La situación ha llegado a tal punto que muchos aficionados abandonaron El Pensativo
Pero no todo son buenas noticias en el mundo de Antigua GFC. Las aguas están revueltas debido a las recientes declaraciones del ex-entrenador colonial, Ronald González, quien denunció acoso por parte de algunos directivos. Estos problemas fuera del campo han generado controversia y distracción, lo que hace que el equipo necesite más que nunca recomponer su rumbo.
La situación ha llegado a tal punto que muchos aficionados abandonaron El Pensativo, el estadio que solía estar lleno hasta antes de las derrotas. Es hora de que Antigua GFC mire hacia adelante, deje atrás las disputas internas y se concentre en el objetivo de regresar a la senda de la victoria. La afición espera un equipo unido y comprometido, dispuesto a superar los obstáculos tanto dentro como fuera del campo. Es momento de volver a hacer vibrar a los corazones de los seguidores Aguacateros y recobrar la confianza perdida.