El Apertura ha llegado a su fin para algunos equipos, y la sorpresa ha sido la protagonista, dejando a los aficionados atónitos y a los equipos favoritos sumidos en una despedida desastrosa. Antigua GFC y CDS Municipal, que lideraron gran parte del torneo, tuvieron un desenlace desafortunado, mientras que el Deportivo Achuapa, flamante líder, no pudo superar al Campeón Nacional Xelajú MC en dos encuentros cruciales, recalcando que el último eliminó al primero.
La jornada final fue testigo de un episodio tenso en el encuentro de CDS Municipal, donde el entrenador Sebastian Bini abandonó la cancha entre insultos y desencuentros con los hinchas luego de la vergonzosa eliminación de uno de los equipos benjamines del torneo, el Deportivo Zacapa. Contrastando con esta situación, Ramón Pezzarossi, al mando de Antigua GFC, mostró una actitud más tolerante y tranquila, reconociendo que su equipo no estuvo a la altura, aunque asumió la responsabilidad de su papel como bateador de emergencia. Su vergugo, de nuevo Roberto Montoya que sigue abofeteando a la gente que lo despidió del club Nazareno. Este duro golpe afecta especialmente a Antigua GFC y CDS Municipal, equipos que realizaron grandes inversiones en sus plantillas y que, una vez más, fracasan en sus intentos de levantar una copa.
El Deportivo Achuapa, a pesar de liderar la tabla clasificatoria, no pudo superar al experimentado Xelajú MC, que anotó en dos partidos casi la misma cantidad de goles que en todo el campeonato. El campeón resurge y Amarini Villatoro empieza a poner el dedo en la boca a los que lo hemos criticado.
Con todo lo dicho, este duro golpe afecta especialmente a Antigua GFC y CDS Municipal, equipos que realizaron grandes inversiones en sus plantillas y que, una vez más, fracasan en sus intentos de levantar una copa. La pregunta que surge es inevitable: ¿aprenderán la lección?
La respuesta a esta incógnita dependerá de la capacidad de los equipos para analizar sus errores, ajustar sus estrategias y enfrentar los desafíos con determinación. La inversión económica debe ir de la mano con una gestión deportiva sólida y la formación de equipos cohesionados que puedan superar las adversidades con unidad y compromiso. Los dueños de equipos y directivas deben analizar a quienes tienen contratando personas, quienes toman decisiones a la ligera y que conveniencias los rodean. Ya que por ejemplo en Antigua, despiden a un técnico que supuestamente no quiso seguir la filosofía, y esta nunca se vió florecer o tan siquiera aparecer con lo hecho por quienes se quedaron a cargo, ya que la constante fué la improvisación en cada partido.
En contraste, Achuapa debe destacar su excelente desempeño durante el torneo y aprender de esta experiencia. Mantener la consistencia y buscar la mejora continua serán clave para trascender en futuras competiciones. La derrota no debe apagar la llama del entusiasmo, sino convertirse en un motor de motivación para alcanzar metas más altas. Los Cebolleros son un claro ejemplo de constancia con jugadores de bajo presupuesto pero de mucha garra y actitud, que no es suficiente, lo que con la poca inversión que tienen, seguramente los dejará como historia botina y de motivación solamente.
El fútbol, en su imprevisibilidad, nos brinda lecciones valiosas. La próxima temporada será una oportunidad para la redención, y los equipos tendrán la oportunidad de escribir un nuevo capítulo en su historia. El Apertura ha dejado huellas imborrables, y ahora es el momento de reflexionar, aprender y prepararse para nuevos desafíos que el deporte nos tiene reservados. El tiempo es corto y apremiante porque el próximo torneo ya está a la vuelta de la esquina.