Lejos quedaron aquellos días en que Yuri Navas , en ese momento concejal, velaba por el buen estado de la gramilla del estadio pensativo, incluso limitaba la práctica del equipo Antigua GFC pero se conservaba una de las mejores canchas del país.
Hoy entre conciertos cristianos, festivales de bandas, lluvias y chamuscas de los allegados a los funcionarios de turno, solo queda el recuerdo de uno de los mejores escenarios deportivos del país.
Y es que después de apreciar este sábado en lo que se ha convertido la gramilla del pensativo da grima y tristeza la manera en que nuestras autoridades manejan la cancha de la Calle Ancha.
Es un secreto a voces que la inversión de las mejoras al estadio han sido de parte de la Junta Directiva del equipo Anigua GFC, por lo que se concluye que lo único que ha hecho la municipalidad a sido otorgar los permisos para que se realicen los trabajos, de allí el conocido dicho que reza: “lo que no nos cuesta hagámoslo fiesta”.
“lo que no nos cuesta hagámoslo fiesta”.
Estas son solo las vísperas, se viene la campaña política y ya veremos cómo se maneja el estadio de los Antigueños, sin duda alguna habrá “chinchilete” con tal de sumar votos.
Que triste que nuestros deportistas se vean afectados por decisiones políticas de gente que poco o nada conoce del deporte. De verdad da pena ajena...pero como dice aquel otro, ya vendrán tiempos mejores.